Pedro Galdón.- Este miércoles 28 de junio, reportaron que un importante bote de aguas blancas ha provocado que el preciado líquido circule raudamente por las calles de las comunidades de Durigua Vieja, El Trigal y otras aledañas desde hace varias semanas atrás, complicando aún más los problemas con el suministro de agua y/o relativos a la vialidad de estas.
Una residente de la zona manifestó que esta fuga se produjo en la Cll. 10, Vía Durigua Vieja, por, presuntamente, una rotura del tramo de tubería de agua potable que pasa bajo el mentado camino —derivada del «vencimiento» de la misma—, pocos días después de que la municipalidad lo hubiera «reparado» en el mes de mayo.
Explicó que el volumen de agua que brota del bote en cuestión es tan grande que corre cual arroyo «hacia abajo», con dirección este, y «se mete para los barrios» cercanos a la vía donde se encuentra, incluyendo aquel en el que vive, por el cual se interna pasando por varios caminos, entre los que está la calle contigua a su casa.
La declarante aseveró que, en El Trigal, el caudal anega las calles de tal manera que «dan vueltas» en búsqueda de rutas alternativas para movilizarse a ciertos puntos del barro y para salir del mismo; y que sus habitantes han hecho zanjas, a maneras de canales, y levantado muros con granzón para desviar el caudal y evitar que sus aguas desemboquen en el interior del barrio y de las casas. Además, dijo que la comunidad de Durigua Vieja adolece de la provisión de agua potable.
Expresó que, por consiguiente, varios vecinos han presentado este problema ante las autoridades, empero, aún no han actuado en pro de su resolución, alegando que en estos momentos no pueden hacerlo debido a que las máquinas requeridas para ello no están disponibles, ya que están siendo utilizadas para tareas similares en Guanare.
Por tanto, exhortó al gobierno municipal a que se avoque a solucionar esta situación cuanto antes para que los residentes de la zona puedan recibir el agua potable en sus casas y puedan transitar por ella sin inconvenientes.
